Combustibles en República Dominicana: Números sobre los costos y la comercialización
Cada vez que la cotización del petróleo genera presión en el mercado interno de los combustibles, sin tomar en cuenta o analizar las verdaderas razones de las alzas, la opinión pública pone en la palestra la necesidad de revisar la estructura de costos que utiliza el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) para fijar los precios de cada galón de gasolina, gasoil o gas licuado.
¿Un economista respetuoso del contexto económico actual tergiversaría la realidad para presentar razones divorciadas de la lógica, a sabiendas de que le falta a la ética? Posiblemente. Buscar un culpable, en todo caso, siempre funciona. Los ciudadanos, principalmente quienes están ávidos de información de calidad, pueden creerlo todo.
El presidente de la República, Luis Abinader, ha prometido que este 27 de febrero, a propósito de su discurso de rendición de cuentas ante la Asamblea Nacional, someterá un proyecto de modificación de la Ley 112-00 de Hidrocarburos. La promesa ya la había hecho para esta misma fecha, pero en 2021. El objetivo es revisar la estructura de costos y todo lo relacionado a la fijación de los precios de combustibles.
¿Se pensó en revisar la legislación cuando los precios internos de los combustibles marcaron récords a la baja durante los peores meses de la pandemia del covid-19? No. ¿Ha habido cambios significativos en la estructura de costos? Tampoco. Quizá sea urgente o necesario modificar la Ley 112-00, pero lo preocupante pudiera ser que se haga por la presión social y mediática que ejerce un contexto de inflación global, del que ninguna economía ha escapado.