Digitalización: ¿una amenaza o un alivio para los empleados bancarios?
La digitalización del sistema financiero, además de contribuir a la lucha contra la pandemia, permitió al sector tener ahorros significativos a nivel monetario y de infraestructura de acuerdo con datos del Banco Central de la República Dominicana (BCRD).
Eso se extiende incluso a los usuarios, con factores como el tiempo invertido en las transacciones, la continuidad del servicio de pagos y la actividad económica.
En ese sentido, aunque los dominicanos demuestran una preferencia por los canales digitales, evidenciado con el crecimiento del uso de las vías no presenciales, lejos de impactar negativamente la fuerza laboral del área, pareciera representar un beneficio al servicio al cliente.
Así lo considera la Asociación de Bancos Múltiples de la República Dominicana (ABA), entidad que explica a elDinero que la incorporación de esas tecnologías a la producción de bienes y servicios, efectivamente, tiene impactos en la fuerza laboral.
Sin embargo, en el caso particular de las transacciones financieras, el proceso de digitalización y modernización no va dirigido a sustituir empleos por tecnología, señalan.
“Más bien es para generar eficiencia que impacte positivamente tanto en facilitar la forma de transaccionar e interactuar con los usuarios como en una mayor inclusión y beneficio de la población”.
En ese orden, sostiene que los servicios bancarios, al igual que todas las industrias productivas del mundo, están siendo sometidos a innovaciones derivadas del surgimiento de nuevas tecnologías: “blockchain, internet de las cosas, big data, inteligencia artificial, por mencionar algunas”.
Usuarios
Al 31 de marzo del 2021, los usuarios registrados en los portales de banca en línea personal o usuarios internet banking eran más de 4.9 millones de acuerdo con el BCRD, y de éstos, 1.8 millones (56%) se encontraban activos según las estadísticas de la Superintendencia de Bancos (SB).
La cifra de personas que utilizan estos canales de servicios solo aumentó desde entonces.
Hacia la digitalización
Esas dos últimas instituciones tienen en curso desde el segundo trimestre de 2021 dos pilotos de apertura 100% digital de cuentas de ahorros, y de acuerdo con la SB, un 100% de los bancos múltiples ofrece el servicio en línea y aplicaciones móviles.
Además, más de un 80% de ellos tiene cajeros automáticos y teleservicio, mientras un 53% disponen de subagentes bancario.
Lejos de significar menos puestos de empleos, desde Seguro Reservas explican que, al disminuir las transacciones presenciales, los colaboradores tienen oportunidad de trabajar en posiciones de soporte y backoffice.
“La cantidad de personas probablemente se reduzca. Sin embargo, seguirá siendo necesario la mano de obra, especialmente para prevención de fraudes o manejo de transacciones, soporte a los sistemas digitales, entre otros”, explica el director de Experiencia del Cliente de esa entidad, Ramón Grullón.
En ese orden, desde ABA comunican que en República Dominicana, al igual que en el resto de América Latina, “se podría pensar que la adopción de nuevas tecnologías aún no supone una amenaza inmediata para la destrucción de empleos, dados los altos niveles de informalidad de su fuerza laboral y los aún bajos niveles de adopción de esas tecnologías”, razón por la que entienden que el factor trabajo seguirá siendo un importante componente en los procesos productivos en la mayoría de las industrias.
Sin embargo, el número de transacciones a través de dispositivos móviles se redujo en un 8.49% entre 2020 y 2021 al pasar de 11 a 10 millones.
Ese ese sentido, entre marzo y septiembre del 2020, el servicio presencial en puntos de venta y/o cajeros automáticos alcanzó los 115.1 millones, equivalente a una reducción de 26% (-40.5 millones) con respecto a igual período de 2019 de acuerdo al BC. De esta forma, la tasa de crecimiento en 2020 para este tipo de transacciones fue aproximadamente 525% más baja que la del 2019 (+8%, +11.8 millones), detalla la ABA.
Uno de los factores que más aceleró la transformación hoy en día fue la crisis sanitaria que atraviesa el mundo, provocada por la pandemia del covid-19. En el país, a pesar de estar en vías de desarrollo, las entidades de intermediación financiera cuentan con servicios tecnológicos que han ayudado a gestionar y superar esta situación, así como a renovar su forma de hacer negocios, sin que esta digitalización, hasta el momento, impacte negativamente la fuerza laboral.
Además, desde épocas mucho más antiguas, la humanidad se ha enfrentado siempre a transformaciones tecnológicas que muchas veces son disruptivas, y el reto para las sociedades ha sido el mismo: “adaptar su fuerza laboral para aprovechar las nuevas oportunidades, que no son necesariamente una amenaza, sino más bien una oportunidad, ya que se crean nuevos puestos de trabajo, en nuevas profesiones como, por ejemplo, expertos en datos, procesos, marketing digital, sistemas, entre otros”.
En cifras
De acuerdo con estadísticas de la Superintendencia de Bancos (SB), los empleados del sistema financiero a nivel nacional aumentaron un 1.75%, pasando de 41,366 en el 2020 a 42,089 en 2021, mientras que el número de oficinas descendió un 1.26% al pasar de 1,354 a 1,337 en ese período.
En cuanto al grueso de esa fuerza laboral, el Banco de Reservas (Banreservas) la concentra a pesar de sufrir una disminución en 2020, al pasar de 10,703 en 2019, a 10,453 al año siguiente. En diciembre de 2021 alcanzaba los 10,855 colaboradores.
El Popular le sigue con una descendente cantidad de empleados desde el 2019 cuanto tenía 7,690. Al cerrar el 2021 la cantidad era de 6,939, para una reducción de su personal en casi un 10% desde el inicio de la pandemia.
La tercera posición de entidades financieras con mayor cantidad de colaboradores la tiene el BHD León, que a diciembre del 2021 tenía 5,357, para un aumento de 3.3 % y 2.29 % con relación a 2020 (5,186) y 2019 (5,237), respectivamente.