Presidente Abinader llama a Iberoamérica a enfrentar unida producción y abastecimiento de alimentos a precios razonables
Santo Domingo. – El presidente Luis Abinader llamó a los países de Iberoamérica que comparten la misma visión y empeño por el desarrollo y bienestar de los pueblos a asumir el compromiso de aunar esfuerzos y explorar oportunidades de colaboración a favor de la agricultura y la producción de alimentos.
Al inaugurar la XI Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de Agricultura, de la cual República Dominicana es sede, el mandatario hizo varias recomendaciones.
El jefe de Estado urgió a tomar medidas e hizo recomendaciones ante la crisis mundial por el impacto del COVID-19 y la guerra de Europa.
El mandatario advirtió que nunca como ahora es más necesario enfrentar, unidos, los retos de mantener abastecida, a precios razonables, la cadena de suministro de alimentos, y al mismo tiempo, garantizar la rentabilidad del productor.
Propuso la creación de un mecanismo permanente de consulta que permita a los países identificar la presencia de barreras técnicas que dificultan el comercio de bienes agropecuarios entre los países.
Además, coordinar el intercambio de tecnologías agropecuarias y, cuando sea posible, realizar planes conjuntos de generación de investigación agropecuaria y ejecutar programas de becas para la formación de especialistas agropecuarios e intercambio de conocimientos.
También, organizar eventos técnicos que permitan conocer los avances en áreas especializadas y científicas de la agricultura y ejecutar programas conjuntos para el desarrollo y aplicación de tecnologías amigables con el medio ambiente que conlleven la descarbonización de la agricultura.
Asimismo, abogar ante los organismos financieros internacionales por la canalización de recursos al sector en condiciones diferenciadas de los demás sectores en términos de tasas y plazo y la creación de un fondo de estabilización de los precios de los fertilizantes, de forma que los Estados puedan recurrir a dicho fondo para evitar transferirlo al agricultor.
Igualmente, crear una comisión de coyuntura permanente para la seguridad alimentaria de nuestros países en la actualidad. Donde haya un país que tenga problemas, todo Iberoamérica debe tener, compartir y ayudar en su solución.
El presidente Abinader estuvo acompañado del ministro de Agricultura dominicano, Limber Cruz y el secretario general iberoamericano, Andrés Allamand, en la sesión inaugural de esta conferencia realizada en el hotel El Embajador.
Retos de producción
Abinader expuso que la celebración de esta cumbre de ministros de Agricultura no podía tener lugar en un momento más oportuno, dadas las grandes dificultades que enfrenta la producción de alimentos en el mundo en estos momentos.
En ese orden, expresó su agradecimiento, en nombre del gobierno, por la asistencia de los ministros y la contribución a la búsqueda de soluciones compartidas a los problemas de la agricultura de sus países.
Dijo que la celebración de esta Cumbre de Ministros de Agricultura de Iberoamérica ocurre en un momento singularmente oportuno, aunque difícil, por las secuelas de la pandemia del COVID-19 y las disrupciones en el intercambio comercial de bienes alimenticios.
También, citó los últimos eventos derivados del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, que han disparado a niveles exorbitantes los precios de los fertilizantes y la energía, insumos imprescindibles para la producción agropecuaria, como factores que conforman un cuadro complejo, el cual pone en riesgo la seguridad alimentaria de los pueblos.
«Celebro esta cumbre porque nunca como ahora la cooperación y el entendimiento entre naciones habían sido tan necesarios para enfrentar los retos que significa mantener abastecida, a precios razonables, la cadena de suministro de alimentos, y al mismo tiempo, garantizar la rentabilidad del productor«, significó.
Y agregó: “Creo no exagerar si afirmo que esto es el mayor desafío para todos los gobiernos de nuestros países”.
El gobernante indicó que la agricultura no es una simple actividad productiva. Si bien, de ella dependen sectores económicos importantes, su mayor importancia consiste en ser fuente indispensable de la alimentación de toda la humanidad.
«Cuando la agricultura entra en crisis su impacto se siente, no solo en la alimentación y nutrición de las personas, sino que contribuye a aumentar las enfermedades, profundizar la pobreza y acelerar las migraciones«, advirtió.
Precisó que la agricultura es una actividad profundamente determinante de la estabilidad política y social de las naciones.
«Justamente, eso es lo que estamos viviendo a escala global: una crisis de los sistemas alimentarios producto de los altos costos de los insumos de producción agrícola como los fertilizantes, la energía y el transporte”, expuso.
Nombró también los precios de los granos básicos como la soya y el maíz, de los cuales depende la producción de proteína animal, cuya fuente principal son las carnes y la leche.
Señaló que a los viejos problemas estructurales de la agricultura y la ruralidad hoy se agregan nuevos, más complejos y desafiantes.
Se refirió al calentamiento global y el cambio climático, así como las limitaciones económicas de muchas naciones para invertir en investigación y desarrollo tecnológico.
Citó, igualmente, la escasez y costos de los insumos productivos, la baja inversión financiera privada en agricultura, la presencia de plagas y enfermedades que limitan el intercambio comercial entre países.
Mencionó la existencia de sociedades más exigentes en cuanto a la calidad e inocuidad de los alimentos que consumen, entre muchos otros elementos que impactan la actividad agropecuaria.
«Todos estos factores que acabo de mencionar merecen la atención de nuestros gobiernos y estoy seguro de que forman parte de la agenda de discusión de esta cumbre, porque nuestros pueblos están a la espera de respuestas concretas a estos complejos problemas«, expresó.