Suspenden la búsqueda de supervivientes del naufragio al oeste de Puerto Rico
La Guardia Costera estadounidense informó que suspendió la búsqueda de posibles supervivientes del naufragio ocurrido el pasado día 12 al oeste de Puerto Rico, en el que murieron once migrantes haitianos y 38 fueron rescatados.
Según detalló este lunes en un comunicado de prensa el comandante de la Guardia Costera en San Juan, el capitán Gregory Magee, la suspensión de la búsqueda se dio a las 22.00 (02.00 GMT) de la noche del domingo.
«Nuestra más profundas condolencias a las familias, amigos y amistades por aquellos que no sobrevivieron o que andan desaparecidos. Nuestras oraciones van hacia ellos», dijo Magee.
Magee reconoció además a todos los agentes de las demás agencias de seguridad que se unieron a la búsqueda y ayudaron a rescatar a las 38 personas de su cercana muerte.
«Estos agentes dieron su máximo esfuerzo de que si quedaban supervivientes, los iban a rescatar. Desafortunadamente, mientras los viajes ilegales continúen, tendremos que seguir respondiendo a eventos similares en el futuro», indicó.
«Los peligros de estas travesías son reales, y a diario vemos a personas montándose en embarcaciones improvisadas y desafiando los peligrosos mares con poca o equipo de salvavidas», lamentó.
Ante ello, recomendó a estas personas que arriesgan sus vidas, que están a merced de contrabandistas que andan despreocupados con sus vidas o seguridad.
«Para aquellos que piensan hacer estos viajes ilegales, no se arriesguen en el mar. Esta advertencia les podría salvar su vida», enfatizó.
Las autoridades no han querido precisar el número de personas que viajaban a bordo de la embarcación, pero de acuerdo a los testimonios de los supervivientes rondarían los 60 o 70.
El portavoz de la Guardia Costera en San Juan, Ricardo Castrodad, explicó a Efe hace varios días que prefieren «no especular» ya que el testimonio de las personas a bordo «muchas veces es contradictorio».
La embarcación, que salió de la costa de República Dominicana, se volcó en un punto situado aproximadamente 10 millas náuticas al norte de Desecheo, una pequeña isla deshabitada al oeste de Puerto Rico.
La franja marítima conocida como Canal de Mona, que separa la República Dominicana de Puerto Rico, es una ruta habitual de migración y todas las semanas son intervenidas embarcaciones.
En los últimos meses se ha incrementado el flujo de migrantes haitianos que usan esta ruta para tratar de llegar a Estados Unidos, debido a las dificultades que plantea el acceso a ese país por tierra a través de México.
La Guardia Costera ha interceptado, entre los meses de octubre y marzo pasados, más de 1.300 migrantes que trataban de llegar a Puerto Rico desde la isla de La Española, que comparten República Dominicana y Haití.