Informe PISA: Se debe mejorar la satisfacción de los profesores con su profesión
Mejorar la calidad de los profesores con un mayor atractivo de la profesión es uno de los vectores para el buen aprendizaje de los alumnos, según los responsables de PISA, que insisten en que más que una buena remuneración, lo más relevante es la satisfacción con su trabajo y un plan de carrera.
Andreas Schleicher, director del departamento de Educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), destacó este martes al presentar PISA a la prensa que «hay poca relación entre los salarios de los profesores y los resultados» de sus alumnos.
Lo importante -subrayó Schleicher- es que la profesión sea estimulante desde el punto de vista intelectual, que esté bien valorada y que haya mucha interacción entre los docentes.
Puso como ejemplo Finlandia, que ha sido en los últimos años uno de los modelos del sistema educativo, y señaló que allí los salarios de los enseñantes no son particularmente elevados, pero la profesión tiene prestigio.
También se refirió a Singapur, que en la edición de PISA que se publicó hoy, correspondiente a las pruebas hechas a los alumnos de 2022, ha obtenido las mejores notas con diferencia de los 81 países y territorios que han participado en esta octava edición del estudio.
El máximo responsable de PISA explicó que esta ciudad-Estado asiática de 5,6 millones de habitantes tiene un sistema de instrucción «claro», con una planificación a largo plazo, en el que no se aprenden muchas cosas, pero en profundidad.
Los docentes no sólo están bien pagados, sino que sobre todo tienen un plan de carrera que los directores se esfuerzan en destacar cuando los contratan.
En términos globales, los resultados de PISA de 2022 cayeron de forma muy significativa respecto a los de la anterior edición, de 2018, y la principal razón es el impacto de la covid, con sus confinamientos y la suspensión de clases para decenas de millones de estudiantes.
Pero no hay una relación mecánica entre el tiempo en que las escuelas estuvieron cerradas y las notas de los alumnos porque -como hizo notar el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann- lo que pesó en particular fue la disponibilidad de los profesores para atender a los alumnos también cuando se estableció la enseñanza a distancia (más disponibilidad, mejores notas).
Cormann también se refirió a que, aunque el gasto en educación es importante, esa regla es cierta hasta un determinado nivel, que la OCDE fija en 75.000 dólares acumulados por alumno, un umbral que ya han superado todos los países de la OCDE salvo Chile, Colombia, Grecia, Letonia, Lituania, México y Turquía.
Por eso el responsable de educación en la OCDE advirtió, en referencia a España, que gastar más dinero no garantiza mejores resultados, y que lo importante es desarrollar las capacidades de los profesores.
Schleicher también destacó algunas de las lecciones de la pandemia, empezando por que «hay que mantener las escuelas abiertas lo máximo posible» y enseñar a los alumnos a aprender por su cuenta.
Otros puntos fundamentales, a su juicio, son reforzar las bases de su bienestar general, limitar las distracciones digitales (por ejemplo con los móviles) o aumentar la implicación de los padres en la escolaridad de los hijos.