La campaña presidencial mexicana cierra con discursos triunfalistas
México cierra este miércoles una extenuante campaña presidencial con mítines masivos de las candidatas punteras y el foco puesto sobre la oficialista Claudia Sheinbaum, quien aseguró que el próximo domingo hará «historia» cuando se confirme su favoritismo en las urnas.
«Este 2 de junio, una vez más, vamos a hacer historia», dijo la izquierdista Sheinbaum, exalcaldesa de Ciudad de México, ante miles de simpatizantes en el Zócalo, principal plaza pública del país.
«De que vamos a ganar, vamos a ganar», añadió la científica de 61 años, quien según un promedio de encuestas realizado por la firma Oraculus aventaja a la aspirante de centroderecha Xóchitl Gálvez por 17 puntos para ser la sucesora del popular mandatario Andrés Manuel López Obrador.
El otro candidato en disputa es el exdiputado centrista Jorge Álvarez Máynez, tercero en la intención de voto.
Sheinbaum reiteró que dará continuidad a los programas sociales en los que el presidente basa su popularidad, de un 66%, así como a su polémica estrategia de atacar la violencia del narcotráfico desde las raíces, a su entender pobreza y marginación.
«Estoy muy entusiasmada (…). ¡Por primera vez tendremos una presidenta!», expresó Evelyn Trasviña, contadora pública de 42 años, mientras aplaudía las promesas de la candidata.
Vestida con un traje indígena, María Isabel Zacarías, de 55 años, llegó al acto desde Oaxaca (sur) pues considera que Sheinbaum mantendrá las ayudas de AMLO, acrónimo del actual mandatario.
«Los campesinos no tenían nada y ahora están mejor con AMLO. Se han comprado su ropita, tienen su comida», señaló la mujer, que se gana la vida vendiendo postres en las calles.
«Xóchitl con visión de futuro»
En tanto, en un coliseo de la próspera ciudad industrial de Monterrey (noreste), Gálvez, senadora y empresaria de raíces indígenas, cerraba su campaña ante una multitud.
La congresista, que representa a una coalición de los partidos tradicionales PRI, PAN y PRD, planea trasladarse más tarde a Tepatepec, su pueblo natal en el central estado de Hidalgo, para un «encuentro con ciudadanos» cerca de la medianoche.
«Xóchitl tiene las mejores propuestas, una visión de futuro muy diferente para los jóvenes. No nada más lo que México necesita ahora, sino en un futuro», declaró a la AFP Cindy Cavazos, empleada oficial de 25 años.
«Si Claudia gana, va a seguir con lo mismo de López Obrador, que tiene a México hundido, quiere convertirlo en otra Venezuela, y no nos vamos a dejar», dijo Bertha Díaz, ama de casa de 71 años.
Álvarez Máynez (Movimiento Ciudadano), por su parte, concluía sus actividades electorales rumbo a la presidencia con un mitin en un céntrico auditorio de la capital mexicana.
Violencia electoral
Fueron casi 90 días de campaña, marcados por el asesinato de candidatos a cargos locales y enconados enfrentamientos entre Sheinbaum y Gálvez.
Según el gobierno, desde septiembre de 2023, cuando comenzó el proceso electoral con la inscripción de aspirantes, han sido asesinados 22 de ellos, aunque la organización civil Data Cívica contabiliza una treintena.
La cuenta letal aumentó el martes, cuando un candidato a alcalde en el estado de Morelos (centro) fue asesinado.
Unos 100 millones de mexicanos -de una población de 129 millones- están habilitados para votar en esta elección a una sola vuelta que se gana por mayoría simple. En México no hay reelección.
Poco más de 20,000 cargos, incluidos el Congreso y nueve de 32 gobernaciones, están en disputa.
El partido oficialista Morena busca ampliar la mayoría simple que tiene en ambas cámaras legislativas, así como defender su bastión, Ciudad de México, con Clara Brugada disputando la alcaldía frente al derechista Santiago Taboada.
Más de 27,000 militares y miembros de la Guardia Nacional serán desplegados para garantizar la seguridad de los comicios, anunció el martes el gobierno.