Osmar Benítez pide unir esfuerzos para nacionalizar mano de obra agrícola
El presidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, instó a las autoridades y la sociedad dominicana a abordar de manera conjunta y “sin tintes políticos” el tema de la mano de obra extranjera en el sector agrícola.
Benítez destacó que, aunque el sector está dispuesto a cumplir con la Ley de Migración, es necesario desarrollar estrategias y programas que permitan nacionalizar progresivamente la fuerza laboral en el campo.
Señaló que actualmente la mayoría de los trabajadores agrícolas son extranjeros, en su mayoría haitianos, y propuso un plan para que, en un plazo de cinco años, al menos el 50% de la mano de obra sea dominicana. “Esto requiere inversión y voluntad política, pero es una meta alcanzable si trabajamos juntos”, aseguró.
El dirigente agropecuario planteó iniciativas como la construcción de viviendas económicas rurales para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores dominicanos y atraerlos al sector agrícola. Estas viviendas podrían construirse con pisos de cemento, madera y techos adecuados, con un costo estimado de RD$500,000 a RD$600,000. “Un trabajador dominicano que viva en condiciones dignas estará más motivado a integrarse al campo”, afirmó.
Además, destacó la importancia de implementar incentivos adicionales, como la entrega de tarjetas de apoyo social, para fomentar la integración de trabajadores dominicanos. “Podemos lograrlo, pero necesitamos un registro claro de quienes ingresan al sector agrícola y un compromiso real para mejorar su calidad de vida”, subrayó Benítez.
El presidente de la JAD también mencionó los avances tecnológicos en la agricultura como una herramienta clave para reducir la dependencia de la mano de obra extranjera. Citó el uso de drones y otras innovaciones tecnológicas que ya se están financiando con un fondo de RD$3,000 millones aportado por el gobierno a través del Banco Agrícola.
En cuanto a la mano de obra extranjera, Benítez insistió en la necesidad de regularizar su entrada al país, asegurando que solo ingresen con pasaporte y permiso de trabajo. Según datos del sector, actualmente entre 280,000 y 300,000 trabajadores se desempeñan en la agricultura, y una parte significativa de ellos son haitianos.
“Es momento de despojarnos de la politiquería y trabajar juntos, independientemente de los partidos políticos, para garantizar la seguridad alimentaria del país y fortalecer nuestra identidad como nación”, señaló Benítez.